Luego del temporal de lluvia se registraron pérdidas de calidad en los lotes de soja que no habían logrado trillarse. Ya está llegando a su finalización la cosecha de soja en la zona del Oeste de Buenos Aires, y se reinicia la trilla del maíz, que se postergó para priorizar la soja.
De a poco se van delineando los planes de siembra, en los que el trigo crecerá en área de la mano de la mejora del precio a cosecha, y también porque es un excelente cultivo para la rotación por su aporte de carbono y porque facilita el control de malezas resistentes.
El maíz y la soja pelean a la par en cuanto a proyecciones de resultados. De a poco tiende a equilibrarse el área de ambos cultivos en la rotación. Esto no hubiera sido posible sin la reducción a 0% de las retenciones a estos cereales, que son fundamentales en la rotación para mantener la sustentabilidad productiva de la agricultura.
PROYECCIONES DE RESULTADOS 2018/19 – OESTE DE BUENOS AIRES
CAMPO PROPIO
Las proyecciones para campo propio, muestran resultados similares para el maíz y la soja en el rango bajo de rindes. El maíz supera a la soja en los rindes altos del rango. En cuanto al tándem trigo/soja de 2ª, sólo con los rindes más altos del rango posible acercarse a los resultados de la soja.
Los rindes de indiferencia en campo propio son del orden de 28 qq/ha en trigo (vs 38 qq/ha proyectados un año atrás),14 qq/ha en soja de 2ª (vs 17 qq/ha), 49 qq/ha en maíz (vs 59 qq/ha en las proyecciones 2017/18), 14 qq/ha en girasol (sin variaciones respecto de las proyecciones de hace un año) y 19 qq/ha en soja de 1ª (vs 25 qq/ha).
CAMPO ARRENDADO
La foto para las siembras en campo arrendado, para un valor de arriendo de 10 qq/ha de soja, muestra quebrantos para trigo/soja 2ª y girasol en el rango bajo de rindes. Aún así el trigo vuelve a ser opción en campó arrendado. Los rindes de indiferencia son del orden de 37 qq/ha en trigo, 18 qq/ha en soja de 2ª, 67 qq/ha en maíz, 20 qq/ha en girasol y 27 qq/ha en soja de 1ª.
ARRENDAMIENTOS
Ya se están renovando los arriendos casi sin modificaciones en los precios medidos en quintales. Si bien los propietarios se encandilan con el precio actual de la soja y la consecuente caída en los costos directos medidos en quintales, los arrendatarios tienen como argumento el revés productivo provocado por la inundación del año pasado, y la fuerte caída en los rindes de la presente campaña a raíz de la sequía y que cuentan con menos toneladas de grano para afrontar la nueva campaña.
Cabe mencionar que la foto de finalización de la campaña 2017/18 es mala. La foto actual proyectada a cosecha es buena, pero falta mucho trecho para la siembra y la cosecha, con lo cual la foto se puede desdibujar. Por el lado de los costos, sin duda se verán alzas. En cuanto a los precios, el mercado de granos mira la evolución de la siembra y el clima en EE.UU.