A lo largo de 35 años desde las páginas de Márgenes hemos reflejado los costos, los ingresos y los resultados proyectados del agro, bajo la premisa básica de generar información práctica, útil y confiable.
Los planteos productivos han cambiado, no solamente en lo relativo a estructuras de costos sino también en cuestiones estratégicas. Esos cambios, que son a veces imperceptibles de un mes a otro o de un año a otro, son notorios cuando se evalúan períodos más largos.
Bajo las mismas nubes, ante los mismos mercados y en el mismo contexto agroeconómico, algunos ganan más que otros en función de los méritos de su gerenciamiento, pero hay que tener presente que incluso los campos mejor manejados han estado expuestos a inseguridad jurídica y permanentes cambios en las reglas de juego- aclara el Espantapájaros, testigo presencial.
Lo que ocurre “tranqueras afuera” tiene, y ha tenido, enorme gravitación sobre la viabilidad de las empresas de campo, más aún cuando por lo general han prevalecido políticas que dejaban al descubierto que lo único que interesaba del campo era su capacidad contributiva.
La excepción a la regla se dio en períodos cortos, que vistos a la distancia, fueron rápidamente revertidos ante una voracidad fiscal sin límites. El problema con el que tiene que convivir el sector privado es el de un sector público excedido de peso. La consecuencia inevitable es el aumento de la presión tributaria, con las retenciones encabezando la lista de impuestos distorsivos.
Desde estas páginas hemos tratado de explicar que “ponerle palos en la rueda” a las posibilidades de crecimiento del agro tiene impacto negativo sobre el nivel de actividad de todos los sectores que dependen en forma directa o indirecta del sector agropecuario. A la larga, sobre toda la economía, que depende de las divisas que genera el agro.
Notas editoriales tales como “Soja para principiantes y para avanzados”, “La bola de cristal desde adentro”, “Al estilo Sherlock Holmes”, “La problemática del cubo”, “Recetas de cocina”, “Manual de supervivencia”, “Alquimias inconducentes”, “La rueda cuadrada” o “El desafío a la ley de gravedad” son ilustrativas de un estilo de comunicación que apunta a la discusión de ideas con las cuales podamos salir del laberinto en el que estamos metidos.
A partir de planteos productivos representativos el énfasis siempre ha estado puesto en mostrar los números del campo de forma en que los lectores puedan anticipar las tendencias de los mercados, tomar decisiones sobre bases prudentes y tener una referencia de comparación con los costos propios.
Desde aquellos primeros cuadros, con un solo planteo por cultivo, la demanda de información de nuestros lectores llevó a la evaluación de resultados en distintas zonas, con tecnología media y con tecnología de punta, y a la inclusión de múltiples variantes para la producción ganadera. Paralelamente se fueron incorporando cuadros con el costo de cosecha, el costo de laboreos agrícolas, costo de siembra, silaje de maíz, embolsado de granos, rollos forrajeros, pastura y gastos de estructura.
Las siembras en campos de terceros siempre fueron una temática a la que le prestamos particular atención. La forma de evaluar el tema de los arrendamientos, desde la óptica de arrendatarios y de arrendadores en simultáneo, es marca registrada por Márgenes. Más del 60% de las siembras se desarrollan bajo arrendamiento o aparcería, en contextos que de un año a otro tienen fuertes cambios.
Otro rubro temático que fuimos desarrollando, de la mano de Marcos Giménez Zapiola fue el de las empresas familiares. Muchas de las situaciones descriptas son más frecuentes y cercanas de lo que parece. Parte de la solución es un buen diagnóstico sobre los temas a resolver en el presente y en el futuro.
La tecnología nos ha dado una mano para que el desarrollo de la revista online sea posible. Desde hace tres años, con el lanzamiento de margenes agro.online hemos dado respuesta a una demanda creciente por parte de nuestros lectores. Las ventajas de contar con información al instante y de tener acceso a todas las notas publicadas en los últimos 20 años, se suman al análisis profundo de los cuadros y notas de la edición impresa.