El mes de septiembre resultó clave para los cultivos de fina, las precipitaciones sobre el área agrícola favorecieron levemente la recarga del perfil de suelo y aportaron una mejora en la condición de los cultivos.
La cebada al día de la fecha se encuentra transitando en su totalidad los estadios de macollaje a espigazón. Los planteos más adelantados son en el norte de Córdoba y parte de Santa Fe, donde comienza a adentrarse en el periodo crítico en condiciones sanitarias muy buenas. De cualquier modo, comienzan a ser necesarias las acciones preventivas contra enfermedades fúngicas como la mancha en red.
Para mantener los rindes proyectados, será necesaria la aparición de lluvias en el corto plazo, ya que si bien las precipitaciones de septiembre favorecieron la recarga del perfil, su aporte es bastante limitado ya que el incremento de las temperaturas favorece la tasa de evapotranspiración y a esa situación se añade la demanda propia del cultivo.
La superficie sembrada para esta campaña 2021/22 es de 1.150.000 hectáreas, concentradas en su mayoría sobre el sudeste de Buenos Aires. En la campaña anterior la siembra fue de 900.000 hectáreas.
Trigo
La condición del cultivo de trigo presenta un porcentaje superior al 60% en condición hídrica óptima, con contrastes muy marcados hacia las regiones del NOA, NEA y centro-norte de Córdoba, en donde la poca humedad en el perfil perjudica severamente al cultivo. Parte de los cuadros más avanzados se encuentran en estas regiones lo que podría repercutir en el rinde final.
Producto de las recientes lluvias, la buena condición hídrica permite que los cultivos transiten estadíos de macollaje y encañazón. Sin embargo, el estado sanitario es de alarma ya que luego de las lluvias, el ambiente se volvió propicio para el desarrollo de enfermedades foliares
Hacia el norte del país, la severa escasez de agua comienza a ser clave en el rendimiento. El clima seco, las altas temperaturas, los vientos y la poca presencia de agua, impide el normal desarrollo del cultivo de trigo que transita los últimos estadios. Las expectativas de rendimientos oscilan entre 4 y 20 qq/Ha.
La superficie sembrada para la campaña 2021/22 es de 6.600.000 hectáreas, 100.000 hectáreas más que la campaña 2020/21.