Las lluvias llegaron para aliviar solo algunas regiones del país, en donde los milímetros caídos fueron puntuales y no se extendieron a regiones carentes de agua, por lo que la condición de sequía se mantuvo y en algunos casos se agravó.
Para el maíz total, la situación frente a la semana anterior, cambió apenas en 1%, (36 vs. 37%), frente a una condición hídrica que mejoró en un 9% acotando el área de regular/sequía.
Para el maíz temprano, sembrado en más del 40% de 6,4 mill. de ha., la situación es difícil. Desde el comienzo de la campaña, el cereal transita sobre un escenario de sequías, en algunos casos extremas, evidenciado semana tras semana el desecamiento del perfil de suelo y empeorando la condición de cultivo. La escasez hídrica y los golpes de calor en etapas fenológicas críticas, lamentablemente provocaron el deterioro de los rindes, hecho que resulta irreversible.
El 50% de los cuadros de la zona núcleo está en regular/mala, un 42% en bueno y solo un 10% en muy bueno. Frente a la semana previa, menos del 20% de los maíces tempranos pasaron a una condición buena.
Debido a que las lluvias llegaron tarde a la campaña del maíz, las pérdidas empiezan a resonar en el orden del 30%. Se registran caída de hojas, plantas estresadas, granos con bajo peso y en paralelo, se planea adelantar la cosecha por peligro de quiebre de cañas, producto del estrés y removilización de reservas para el llenado de granos, lo que generó el deterioro del porte. En 20 días podría darse inicio a la cosecha.
Desde la Bolsa de Comercio de Rosario indican que los rindes serán inferiores en varias regiones de importancia productivas del país.
En Rojas y San Pedro, hacia el noroeste de Buenos Aires, los rindes esperados se ubican en 40 a 50 qq/ha, frente al promedio de 120/140 qq/ha ya que el 100% de los planteos está en malas condiciones.
En General Villegas, el 70% espera rindes promedios, pero para el 30% restante se estima la mitad del rendimiento (50 vs 100 qq/ha).
Para Bigand, Santa Fe, los rindes esperados son heterogéneos, entre 35 a 70 qq/ha, en este caso tendrá incidencia la fecha de siembra. En Cañada de Gómez se esperan entre 70 a 90 qq/ha y en Carlos Pellegrini entre 90 a 100 qq/ha.
Por otra parte, las siembras tardías se adentran en otro escenario, la mayoría transitan etapas vegetativas en donde la demanda de agua es menor, y por lo tanto, las recientes lluvias resultaron benéficas para estos planteos.
Si los eventos de precipitaciones llegaran en el mes de febrero, en donde el cultivo estará en floración, el maíz tardío puede posicionarse mejor siendo una revancha para los productores,
Por último, para los próximos días se prevén abundantes precipitaciones, que continuarán recargando los cuadros de maíz sobre el oeste, centro y sur de la región agrícola. Aún restan por recibir lluvias los lotes del centro-norte y nordeste.