Desde la Bolsa de Comercio de Rosario, dieron a conocer la primera estimación para la soja 2021/22 con resultados poco alentadores.
Enero dejó un escenario complejo para la campaña de soja, la primera estimación para el ciclo 2021/22 indica que sería de 40,5 mill.tn. con 4,5 mill. de ha. en condiciones regulares y con 1,1 mill. de ha. en malas condiciones, estimando que alrededor de 750.000 hectáreas no llegarían a recolectarse.
Las intensas lluvias y la extrema ola de calor de enero, generó pérdidas de plantas y dejó afuera, por escasez hídrica, a más de 100.000 hectáreas sobre el Norte argentino. En línea con las primeras semanas del año, febrero se desarrolla bajo pronósticos climáticos cambiantes. En principio, se esperaba que las lluvias recargaran nuevamente los perfiles del suelo, pero las precipitaciones que se presentaron no fueron importantes e impidieron revertir plenamente la condición hídrica en suelo para la campaña gruesa en curso.
Tal es así, que sobre Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos la situación edáfica es comprometida y la sequía comienza a condicionar el desarrollo de los cultivos, al igual que en la región Pampeana en donde muy pocos lotes lograron revertir las pérdidas que causó el clima y avanzan en el desarrollo del cultivo con escasas reservas en suelo.
Bajo esta situación y con pronósticos climáticos poco alentadores, más del 30% de la soja actual está en condiciones regulares a malas con un rinde promedio estimado que no lograría superar los 30 qq/ha en todo el país.
Al momento, el rinde nacional estimado es de 26,4 qq/ha con un cultivo que atraviesa el periodo de definición de rendimiento con reservas hídricas escasas.
Desde la Bolsa de Comercio de Rosario indican que a niveles productivos, la pérdida presenta una caída de 2,75 mill.tn menos para la oleaginosa.
Del mismo modo, la soja de segunda requiere de precipitaciones en lo inmediato para mantener el potencial productivo.