La campaña de soja recientemente finalizada dejó una producción acumulada de 700.000 tn. por debajo de la proyección inicial.
El ciclo 2021/22, comenzaban con 16,3 mill. ha. de soja sembrada, 600 mil hectáreas menos que el ciclo 2020/21 y un 6% inferior respecto al promedio de las últimas cinco campañas (17,3 mill. ha.)
La localidad que presentó la mayor variación interanual en la siembra fue la región del NOA, un 17,5% menos, mientras que el sudoeste de Buenos Aires y el sur de La Pampa, mostraron un incremento del 23,7%.
Sobre el total, la siembra presentó una reducción del 3,6 % respecto a la campaña anterior.
En el transcurso del ciclo, la falta de humedad edáfica limitó las labores de siembra y generó un recorte de 200 mil ha. Luego, las altas temperaturas y la ausencia de precipitaciones continuaron afectando los cuadros principalmente sobre el centro del área agrícola, al igual que lo hicieron las heladas tempranas que perjudican al cultivo en sus estadios críticos.
Hacia el cierre de campaña y con el 100% de la superficie apta para ser cosechada, la producción nacional sojera alcanzó las 43,3 mill. tn. 200 mil tn. por encima de la campaña 2020/21 y 8,1% por debajo de la producción media de las últimas 5 campañas (47,1 mill. tn). En paralelo, el rinde nacional fue de 27,9 qq/ha, 4,1% superior al ciclo previo.
Por último, la cadena sojera aportaría a la economía en valor agregado 23.972 mill. de dólares, 17,1% más que el ciclo previo a raíz de la suba de los precios de la oleaginosa. Asimismo, generaría exportaciones por un total de 25.443 mill. de dólares.