Con aproximadamente el 100% de las hectáreas sembradas, la condición del cultivo mejoró tras las lluvias.
En la última semana, la siembra del cultivo cubrió el 98,8% de la superficie proyectada (6,1 mill. de ha.), restando algunas pocas hectáreas en el sudoeste-sudeste de Buenos Aires, Cuenca del Salado y sur de La Pampa para concluir con las labores de siembra de la campaña 2022/23.
Parte del avance de los últimos días se debe a las recientes precipitaciones que al mismo tiempo permitieron la mejora de los cuadros implantados. Tal es así que sobre el sur del área agrícola el escenario mejoró, pero en contraparte sobre la región norte del país, la ausencia de lluvias continúan afectando los planteos agrícolas.
Del total implantado, el 1,3% se encuentra iniciando la etapa de encañazón mientras que más del 24% en macollaje bajo una condición hídrica a nivel país del 35% en condiciones regular/sequía con principal foco en la región norte del área agrícola.
Respecto a la semana anterior, la condición hídrica mejoró en un 10% y actualmente el 65% del área agrícola nacional se encuentra caracterizada como óptima/adecuada lo que permitió que el cultivo también mejore levemente, aunque respecto al ciclo anterior, la superficie catalogada con condiciones malas es superior.
Es por ello que parte de los lotes implantados en el centro del área agrícola reportan heterogeneidad, deterioro en los tejidos, crecimientos pobres y disminución del número de plantas. Al mismo tiempo, el cultivo podría recibir menos fertilización en aquellas zonas donde las precipitaciones no se presentaron y varios lotes quedaron con nutrientes por debajo del límite, afectando aún más la condición del trigo.
