Con escasos milímetros en suelo, en la última semana la siembra de girasol prácticamente no mostró avances. La falta de humedad impide el ingreso de los sembradoras.
Las bajas temperaturas y la falta de precipitaciones determinan un escenario alarmante para el inicio de la campaña de la oleaginosa que en la última semana solo avanzó un 1%, logrando cubrir el 20,9% de las hectáreas proyectadas para el ciclo 2022/23. En números absolutos son 418.000 hectáreas de las 2.000.000 estimadas.
En paralelo, las bajas temperaturas registradas en la última semana sobre varias zonas productoras del país, generaron daños en aquellos lotes que habían logrado implantarse, mostrando daños en tejidos, crecimiento irregular y en algunos casos se tuvo que volver a sembrar a partir de pérdidas del stand de plantas.
A partir de las heladas, aproximadamente el 45% de los lotes en el NEA, presentan una condición de cultivo regular/mala, en donde los cuadros afectados fueron los más adelantados. Entre los daños más comunes está el quemado de apicales, clorosis en las hojas y en casos extremos se observa reducción del área sembrada.
En simultáneo, sobre el centro norte de Santa Fe ya comienza a observarse daños del area foliar por estrés hídrico.
A raíz de esta situación, desde la Bolsa de Cereales informan que la campaña presenta una condición hídrica en suelo que abarca el 57% de los cuadros bajo la caracterización regular/sequía y con el 22% de los cultivos implantados bajo un estado regular, con severos signos por la falta de lluvia y la presencia de heladas.
Por último, para los próximos días se pronostican lluvias lo cual podría mejorar el escenario para la oleaginosa, así como también un leve incremento de las temperaturas que en paralelo aumenta la demanda de las precipitaciones producto de la evaporación.