Con un riesgo de déficit hídrico alto nivel país, se evalúa la pérdida del 40% de la superficie en la zona núcleo.
Las semanas avanzan y las lluvias no llegan, la condición del cultivo empeora dejando a la campaña 2022/23 dentro de las peores para la región núcleo.
La mayor parte del país presenta condiciones de sequía extremas y a medida que pasan los días más localidades se suman a esta caracterización, quedando fuera de este rango el sur de Buenos Aires que mantiene niveles bajos a moderados, el este de Corrientes y el noreste de Entre Ríos.
A nivel de cultivo, las estimaciones de agua útil en suelo para los primeros centímetros de los planteos tempranos se mantienen deficitarias en una amplia región del país producto de la falta de lluvias y el aumento de temperaturas.
En total, el área con déficit se extiende desde el este y abarca la mayor parte de los suelos fértiles de Santa Fe, situación que también se presenta en el noroeste de la provincia de Buenos Aires.
En Córdoba y Santiago del Estero una gran superficie denota estado de sequía, la cual se mantuvo en el último mes.
En la zona Núcleo, las reservas se estiman en escasas al este y deficitarias al oeste, mientras que en el norte de La Pampa los niveles deficitarios se incrementaron notablemente en los últimos 15 días.
En simultáneo, en Entre Ríos los niveles se mantienen estables y no se registran desecamientos marcados, además las reservas se estiman entre regulares y adecuadas, aunque también se aprecian áreas con reservas deficitarias.
Hacia el sur de Buenos Aires los niveles de reserva son regulares a adecuados. Pero tanto para el este de Entre Ríos y el sur de Buenos Aires, se requieren lluvias en el corto plazo.
Esta situación en la región Núcleo llevó a que se evalúe la finalización del ciclo del cultivo en un área que abarca el 40% de la superficie sembrada. Esta superficie se perdió producto de las escasas reservas hídricas y las heladas que este año marcaron un récord.
El mes saliente dejó el 80% del trigo en malas condiciones, el 15% en buenas y el 5% restante en muy buenas.
A raíz de una gran superficie con condiciones malas se estima que el 40% se perderá, representando un total de 500.00 hectáreas.
En septiembre de 2020, las hectáreas por secarse eran 170.000, pero finalmente se perdieron 130.000 ha. número que marcó el récord de pérdidas en la región Núcleo.
Desde la Bolsa de Comercio de Rosario indicaron que en General Pinto una gran superficie mantiene condiciones de sequía severa incluso se evalúa la pérdida del 60% de los trigos que incluso habían sido fertilizados con el objetivo de superar los 50 qq/ha.
En Colón también se observan lotes al límite de secarse, que al igual que en General Pinto se habían fertilizado con el pnb stevio de alcanzar los 60 qq/ha. Actualmente se esperan 25 qq/ha. En Bigand el 80% de los cuadros están en malas condiciones y los rindes se proyectan en 10 a 12 qq/ha.
En el extremo norte de la región Núcleo, los cuadros presentan leves mejoras. En El Trébol el 30% de los cuadros mantiene muy buenas condiciones y el 70% buenas, mientras que en Carlos Pellegrini el 80% está bueno y el 20% en muy buenas condiciones.
Por último, desde la BCR informan que parte de estas pérdidas podrían reducirse si llueven entre 20 a 60 mm antes de la primera quincena de octubre.