En vista de una campaña sin precedentes, la siembra cada vez se ve más dificultosa, los planteos no se concretan, las ventanas de siembra finalizan y las ventas de fertilizantes al país caen.
A raíz de la fuerte sequía que azota a más de 141.000.000 hectáreas a nivel país, el mercado de fertilizantes se ve afectado. Las condiciones ambientales impiden concretar planteos de siembra y por lo tanto, efectuar la aplicación de los insumos químicos. Es por ello, que fuentes privadas indican que el mercado de importación para la Argentina se da por finalizada.
El fin del año agrícola y la falta de movimientos de fertilizantes en el mercado interno permiten proyectar el cierre de la campaña de insumos. En paralelo, en los últimos días y a partir del nuevo sistema de control y trazabilidad de las operaciones del exterior, SIRA (Sistema de Importaciones de la República Argentina), muchas operaciones pusieron un freno total. Esto impide el normal desarrollo del mercado a fines del ciclo agrícola, lo que lleva a que si las condiciones ambientales dan un vuelco importante y permiten la aplicación de fertilizantes, es posible que en el mercado local no se cuente con disponibilidad de ciertos insumos hacia el fin de campaña.
Esta tendencia hacia la baja se registró durante todo el ciclo 2022, tanto para los fertilizantes nitrogenados como para los fosforados. Respecto a los primeros, en los nueve meses de 2022, se registraron un total de 750.000 tn. de urea importadas, mientras que el 2021 finalizó con 1.5 mill. tn. Posiblemente el resultado final de un cierre inferior al 40% respecto del ciclo anterior. Por otra parte, sin ofertas claras, la urea se mantiene en $715 CFR.
En cuanto a los fosforados, los precios para MAP se mantienen en $630-660 CFR con importaciones totales de 910.000 tn para el transcurso del 2022, lo que prevé una merma del 30% interanual.