Durante los últimos diez días se registraron temperaturas muy altas, en un escenario de déficit hídrico en el perfil de suelo, lo que afectó severamente los cuadros de maíz tardío.
Los lotes tardíos y de segunda transitaban etapas de plena definición de rendimiento cuando se presentó la décima ola de calor, lo que llevó a una alteración en la expectativa de producción en varias zonas del área agrícola.
A raíz de esto, desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, nuevamente recortaron la proyección de producción en 3,5 mill. tn. para la campaña 2022/23 y la estimación actual se ubica en 37,5 mill. tn. De concretarse este volumen, sería 14,5 mill. tn. menos que la campaña 2021/22: 52 mill. tn.
Si bien en principio se esperaba que los planteos tardíos mantengan rendimientos mejores a los tempranos, la situación siguió agravándose y la gran cantidad de hectáreas destinadas a maíz tardío se vieron afectadas en su gran mayoría. En un escenario de alta demanda atmosférica que condiciono la evapotranspiración del cultivo, favoreció la marchitación y dejó a los lotes sin la posibilidad de transitar normalmente el periodo crítico,
Por otra parte, la cosecha de lotes tempranos mantiene rendimientos promedio de 35 qq/ha reflejando las complicaciones de la campaña, ya que lo cosechado se mantiene por debajo del promedio. En esta semana, la cosecha continuará sobre Entre Ríos y Santa Fe, provincias que registran una gran cantidad de lotes perdidos.