La región central del país estará afectada por perturbaciones que permitirán el desarrollo de precipitaciones durante la semana con mejoras temporarias.
La presencia de un centro de alta presión de fuerte estabilidad en el centro del país, mantuvo las condiciones atmosféricas estables, dejando una semana ausente de precipitaciones.
A partir de hoy, se incrementa la inestabilidad y la probabilidad de lluvias, aunque será una semana con mejoras temporales, ya a partir de la madrugada del sábado el ambiente se torna estable, aunque no se descartan lluvias aisladas. Esta situación se mantendrá durante toda la semana siguiente.
Si bien a partir del ingreso de los vientos polares se pronostican lluvias, la mayor parte del área agrícola argentina registrará precipitaciones escasas a nulas, con promedios máximos de 10 mm.
Respecto a las temperaturas, los vientos del trópico provocarán temperaturas agradables, pero luego el ingreso de los vientos del sur llevarán al descenso térmico, en donde las temperaturas pasan de 18/22°C a 15/18°C luego del pasaje del sistema frontal.
Llegando al miércoles 25, retornarán los vientos del trópico causando un incremento de las temperaturas, sin superar los límites de lo normal. Las máximas tenderán a ascender nuevamente alcanzado los 20°C, aunque las mínimas a partir del día jueves registrarán valores entre 4 y 8°C.
Con un escenario de escasas precipitaciones en abril, y un mes de mayo que no logra revertir el saldo pluvial negativo, la capacidad para restablecer los perfiles a niveles adecuados para la siembra de la fina se ven truncados, y nuevamente la expectativa se traslada a la mitad de mes restante, aunque si se desarrollan lluvias estas apenas green alcanzar los valores normales de humedad en suelo.
Esta situación deja a la mitad de la región Pampeana lejos de las condiciones ideales para iniciar la siembra, incluso se necesitan más de 70 mm para minimizar el riesgo de siembra. De no concretarse un evento de tal magnitud, la superficie estimada podría recortarse sustancialmente.