Se dio inicio oficialmente a la siembra de cebada para la que se estima una superficie a sembrar de 1,3 mill. de ha.
Al igual que en trigo la disponibilidad hídrica es crucial y variable en distintas zonas productivas lo que también tiene relevancia no sólo en la superficie a sembrar, si no también en el avance de las máquinas. En los últimos 15 días se sembraron un total de 190.000 ha. lo que permite concentrar el 15% de la estimación realizada por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Hacia el oeste, los suelos continúan necesitando precipitaciones en lo inmediato que le permitan incorporar los cuadros de fina, incluso en caso de sembrarse, los milímetros actuales y disponibles son escasos y no permiten asegurar la emergencia del cultivo.
Hacia el sudeste y sudoeste de la región productiva, los milímetros en suelo son óptimos y permiten cubrir el inicio del cultivo. El suelo no solo en la superficie mantiene estados óptimos, sino también en todo el perfil.
Hacia el centro este del área agrícola, las labores de siembra se desarrollan con normalidad producto de que las lluvias de finales de mayo revirtiendo el escenario agrícola.
En las regiones Núcleo Norte y Sur se estima una reducción del 42% y del 46% respectivamente. En estas zonas la siembra ya comenzó y cubren, aproximadamente, el 27% de cada superficie.
En el sudeste del área agrícola, el aporte constante de agua útil en suelo, permite incorporar más de 80 mil. ha. lo que representa el 15% de la superficie estimada para esta zona, hacia el sudoeste se sembraron 63 mil. ha., el 17% de la superficie estimada para la región.
En zonas productivas donde los milímetros en suelo son regulares será de vital importancias las lluvias a corto plazo, ya que según fuentes oficiales la regulación de las lluvias se espera en primario para fines del trimestre jun-jul-ago.