El ritmo de cosecha se mantiene por debajo de años anterior producto de una mayor superficie destinada a los planteos tardíos
La superficie sembrada de maíz tardío en nuestro país es histórica. Las reservas hídricas escasas al comienzo de la campaña gruesa 2022/23 llevó a que gran parte de los planteos de maíz se siembren tardíamente, lo que explica la lentitud en el ritmo de cosecha nacional que se encuentra por debajo de años anteriores.
Se espera que en las próximas dos semanas el ritmo aumente principalmente en la zona Núcleo, lo que podría recortar la demora y llevar a aumentos en la comercialización que momentáneamente abarca el 35%. Este ritmo de ventas se encuentra por debajo de los años anteriores, ya que a esta altura del año se habían vendido el 50% de la productividad. No solo se registran demoras en la comercialización, sino que también en las operaciones por precio no fijado, la cual es mayor a la de años anteriores, ya que el 34% del maíz comprado no tiene precio fijo, superando al 18% promedio de los últimos cinco ciclos.
Panorama internacional
Por otra parte, el medio oeste de Estados Unidos avanza en su siembra con el 60% cubierto. Sin embargo, actualmente mantiene una situación de escasez hídrica, lo que marca un panorama diferente al del año pasado. La mayoría de los lotes se encuentran en condiciones de sequía severa y moderada que de ampliarse a otras zonas marcaría un recorte productivo por falta de lluvias.
Esta situación enmarca al mercado de Chicago que hace un mes refleja esta situación mostrando un fuerte incremento en los precios del cereal. Por último, la cosecha brasileña del maíz de segunda, sería récord y pone un freno en los precios, permitiendo que al momento esté por debajo del año pasado en un 8%.