Según Columbia Climate School, International Research Institute (IRI) indican que el Niño comienza a fortalecerse y existen posibilidades de que se establezca hasta el verano 2024.
Hasta el mes de julio de 2023 las condiciones del fenómeno se mantuvieron débiles en el Pacífico ecuatorial pero comienzan a fortalecerse de forma gradual y cambian el patrón de débil a moderado a partir de julio.
Como se registra una fase cálida del ENOS, los pronósticos indican que se establecerá el evento de El Niño durante el invierno, continuando en la primavera y el verano en una probabilidad superior al 90%, mientras que llegando al otoño se debilitaría.
Por otro lado, el índice de Oscilación del Sur (IOS) desde julio de 2021 se mantuvo en valores positivos en función a una fase Niña. Sin embargo desde enero de 2023, con el debilitamiento de la Niña, el IOS empezó a disminuir y alcanzó valores ligeramente negativos, lo que lleva a afirmar un Niño débil actual, pero esta situación se modificara de forma cautelosa.