Por la sequía, la actividad económica cayó a niveles históricamente bajos, incluso peores a los de la pandemia.
Los recientes datos del INDEC, indican que la actividad económica se encuentra dentro de los registros más bajos desde octubre de 2020, plena pandemia, pero esta vez producto de la sequía que dejó una reducción económica del sector agropecuario del 50%.
En más de 2 años, la actividad económica en el mes de mayo cayó un 5,5%, la mayor variación negativa en más de 2 años. También durante los primeros meses del 2023, mantienen una retracción del 1,3% al mismo periodo del 2022.
Desde octubre de 2020 no se registraba una baja tan importante en la económica ya que en ese mes había retrocedido un 6,3%.
Posterior a la pandemia y cuando la economía comenzaba a activarse, la contracción económica era de 2,2% en febrero. En este escenario el área de agricultura, ganadería, caza y silvicultura, por la sequía marcaron una caída del 43,8%, mientras que la Industria pesquera se contrajo un 22,6%.
En contraparte, las explotaciones mineras avanzaron en un 5%, mientras que el sector de hoteles y restaurantes, un 4,1%. Con aumentos menores le siguen el comercio mayorista y minorista que aumentó en un 2,8% interanual, administración pública y defensa 2,4%, actividades inmobiliarias un 1,7% y los servicios sociales y salud 2%.