En julio, el área total en sequías se incrementó en 7,5 mill. de hectáreas por aumentos de la superficie en la región central.
El reciente informe de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca mostró que durante julio se incrementó el área catalogada como sequía, con aumentos para los lotes que presentan signos leves, aunque se revirtieron los calificados como severos que permanecen en más de 2 mill. ha. principalmente con esta calificación, el noroeste de Buenos Aires.
En la zona núcleo, la sequía permanece, si bien mejoró por el momento existe una gran cantidad de hectáreas bajo condiciones secas a partir de la falta de precipitaciones efectivas.
En paralelo a la mejora en la zona núcleo, contrasta el noreste de Patagonia y parte de Mendoza que registra un empeoramiento, incluyendo Entre Ríos, La Pampa, Buenos Aires y sur de Córdoba.
Esta situación se da en un contexto de lluvias poco significativas en gran parte del país. Respecto de los promedios, persisten los déficits y anomalías sobre el noreste de la Patagonia, parte de la región central y norte del país.
En cuanto a los niveles de humedad en suelo, varias regiones muestran valores críticos por ejemplo en el Litoral, sureste de la región Pampeana, parte de Cuyo y región central, con mejoras en el este de Buenos Aires y Entre Ríos.
Entre los principales problemas por la sequía se encuentran el normal desarrollo de la siembra, la implantación de los verdeos de invierno, el empeoramiento del estado corporal de bovinos, la disminución del agua como bebida animal, el descenso de la oferta forrajera, la disminución del desarrollo de agua para trigo como sucede en el oeste de Buenos Aires y norte de Santa Fe.
Por último, respecto de los niveles hidrométricos, estos también disminuyeron afectando los brazos internos y generando un menor drenaje hacia el Paraguay y Paraná. En cuanto a este último, los niveles se encuentran dentro del registro de aguas bajas, aunque no muestran la misma situación de años anteriores en donde eran extremadamente críticas.