Ante la falta de humedad en suelo cae la estimación de siembra en 50.000 ha.
Luego de una semana sin lluvias en las regiones productivas del país y con temperaturas máximas que oscilaron en 30 y 34°C, con el registro más elevado en la localidad de Pellegrini, Santa Fe, los perfiles aumentaron la pérdida de agua.
La ausencia de precipitaciones deja reservas de agua en el suelo disminuidas, que decrecen hacia el oeste manteniendo niveles de escasez a sequía, principalmente en Córdoba.
Con estas condiciones hídricas se requieren en las próximas dos semanas, acumulados entre 60 y 140 mm para alcanzar el estado óptimo de las reservas y continuar con las siembras de los cultivos. Zonas como el norte de La Pampa, el oeste de Córdoba y el centro de Santa Fe continúan con una prolongada sequía y apenas superaron los cuatro milímetros acumulados en los últimos veinte días. Asimismo, vientos de 100 km/h se hicieron presentes en el centro de la región Pampeana aumentando la pérdida de agua en suelo.
En este escenario, en los primeros centímetros del perfil carentes de agua útil, las labores de implantación del cultivo en girasol se mantienen relegadas y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires redujo la implantación en 50.000 ha. principalmente en el NEA y el centro norte de Santa Fe. La falta de lluvias fue el origen por el cual los productores no quieren demorar la fecha de siembra y cancelaron las labores para el cultivo.
Al momento solo se sembró del 8,8% de lo estimado con una demora del 12% frente al ciclo previo.